Si has sido tocado por el Efecto Mandela y no sabes qué hacer, mi mejor consejo es: confía en tus recuerdos. Ya lo he dicho: darte cuenta de que tu realidad no es como la recuerdas puede ser impactante, pero si de verdad estás seguro de esos recuerdos, cuestiona la realidad, no te sientas mal por hacer eso: no estás loco.
El Efecto Mandela ha sido explicado de forma simplista con el argumento de que: «la memoria tiende a fallar, a crear patrones, a mezclar ideas no relacionadas y a traicionarnos, y que todos los que lo viven son gente que no pone atención y no recuerda bien». Es cierto que la memoria suele ser débil y poco confiable, que llena los huecos y nos puede engañar; y si eres sincero contigo mismo, seguro hay muchas cosas de las que no estás 100% seguro. En esos casos sí, esa sería la explicación: fallas de la memoria.
Sin embargo, también hay otras cosas que están más allá de tu memoria -como en mi ejemplo del nombre: tu nombre no es algo que puedas olvidar o recordar mal-, cosas que están dentro de ti, que te son muy cercanas, que no hay forma de que las estés recordando mal, que nada ni nadie influyó para modificar tu recuerdo, que tú sabes, sientes y vives ese recuerdo, y estás total, completa y absolutamente seguro del mismo. Son esos casos los que se pueden considerar verdaderos Efectos Mandela.
Aquí tenemos una característica muy especial del E.M.: es algo muy personal, depende únicamente de tus propios recuerdos. Por eso al estudiar esto, es fundamental ser muy honesto contigo mismo y responderte con total sinceridad: “¿Qué tan seguro estoy de esto?” Nadie, absolutamente nadie, puede responder esa pregunta por ti: son tus recuerdos, no de los demás. Si tienes dudas, sé honesto y acéptalo, no porque los demás digan que algo ha cambiado debes aceptarlo y adoptarlo como propio. Pero si no tienes ninguna duda, si de verdad sabes, sientes y vives que tu recuerdo es real, no lo hagas a un lado, no dejes que la realidad te haga dudar, confía en tus recuerdos y aférrate a ellos.
La mente acepta con cierta facilidad el cambio, puede manejarlo; pero le incomoda la incertidumbre y no sabe cómo manejar lo imposible.
Por eso cuando te enfrentas con algo que recuerdas distinto a como la realidad te dice que es, y descubres que nunca ha sido como tú lo recuerdas, tu cerebro inmediatamente te dirá que te equivocas, que no pusiste atención, que tu recuerdo fue alterado con el tiempo, que estás envejeciendo, que algo te hizo recordarlo mal, que te influenciaron de alguna manera, que todo es una ilusión y que las cosas nunca han sido como tú las recuerdas.
O quizás te quiera hacer pensar que eso que observas sí ha cambiado, pero de forma «natural», porque la marca modificó su nombre o su logo, porque las cosas evolucionaron y se modificaron, porque la tecnología ha permitido una mejor representación de las cosas y ahora sí se ven como de verdad son y antes no, o cualquier otra cosa que no sea «imposible». Esto es un mecanismo de defensa propio de la mente para hacerte sentir seguro, para evitar la ansiedad y alejarse de la idea de que estás loco.
Por si fuera poco, el E.M. tiene una gran complicación: es casi imposible de probar –casi, pero es aquí donde se hace fundamental el concepto de «evidencia residual», que explicaré más adelante–. ¿Cómo haces que alguien vea tus recuerdos como tú los ves y pueda darse cuenta de que difieren de la realidad? ¿Cómo le explicas a los demás que algo está cambiado para ti, si todos los registros existentes dicen lo contrario, o si ellos no lo recuerda como tú?
Seguro pensarán que estás loco y te dirán todo eso que tú mismo ya pensaste: que no pones atención, que te falla la memoria, que te dejas engañar por tu mente o por otras personas, etc; todo eso que dicen quienes no lo experimentan. Por eso es mucho más fácil para la mayoría de las personas que se enfrentan al fenómeno, adoptar la idea de que su memoria falló y simplemente no tomarle importancia, para poder seguir adelante con sus vidas y no poner su cerebro en conflicto.
Pero si decides aferrarte a tu recuerdo y luchas contra esa corriente, y si decides defender tu memoria, aún cuando los demás perciban la realidad distinta, entonces no sólo has sido tocado por el Efecto Mandela: has despertado.
Y una vez que has llegado a este punto, confía en ti, mantente firme y seguro, no te dejes intimidar por lo que los demás digan y toma en cuenta los siguientes puntos:
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- Sí, tus recuerdos son reales, aunque la «realidad» no lo refleje.
- No, no estás loco, tus recuerdos no son falsas memorias ni los estás inventando.
- No, no estás solo, somos miles o cientos de miles de personas quienes lo experimentamos.
- Sí, es muy complicado entender, asimilar y aprender a vivir con esto: la idea de que la realidad ha cambiado puede ser abrumadora para muchas personas.
- No, no deberías dejar que tus recuerdos se pierdan, al contrario: confía en ellos, compártelos con los demás, encuentra otras personas con esos mismos recuerdos y busca evidencias que respalden tu memoria (sí, sí las hay, ya lo verás).
- Sí, será difícil que la gente te crea; así que si decides compartir esta información con los demás, deberás estar dispuesto a recibir burlas, críticas, a ser ignorado, catalogado de «conspiranóico» y más. Pero es muy satisfactorio y gratificante encontrar personas que recuerdan las cosas del mismo modo que tú.
- Lo más importante: Si quieres contarle a alguien sobre el Efecto Mandela, te sugiero no comenzar presentando las cosas que están cambiadas sino explicando el fenómeno. De hecho hice un post específicamente sobre esto, con una metodología sobre Cómo hablar del E.M., que te podría ser útil.
Hasta ahora todo esto ha sido muy teórico, muy explicativo, justamente siguiendo mi metodología sobre cómo hablar del E.M., primero describiendo en general el fenómeno para después hablar de cambios. Y ahora sí, para adentrarnos en dichos cambios te llevaré por mi camino personal; te invito a que me acompañes a recorrer:
Si llegaste directo aquí pero no has leído toda la primera parte del sitio, te recomiendo hacerlo antes de seguir avanzando, para entender al 100% de qué se trata el Efecto Mandela y todos los conceptos relacionados.
O nos han cambiado la Realidad o simplemente a nosotros nos han cambiado de Realidad lo cual no es lo mismo y aquí yo quiero compartir mi propia experiencia de aquel 2012 que tan anunciaban de que sucedería algo lo cual aparentemente nunca sucedió y la vida siguió igual aparentemente normal tal y como todos la conocemos…. Pero fue en las primeras semanas de enero del 2013 en una mañana que me desperté con una muy fuerte sensación que me recorrio todo el cuerpo y que me decía que este mundo en el que yo me encontraba no era el mismo, que mi casa no era la misma, que ni el cielo ni incluso mi cuerpo eran los que me pertenecían y que todo absolutamente todo me había sido cambiado…. Fue una sensación muy fuerte que hasta me dio escalofríos y por alguna otra razón me sentí especialmente radiante y muy feliz en aquel dia… Luego mi mente me dijo que debía realizar mis labores cotidianas y me olvide de lo sucedido… Pero apenas hace tres semanas cuando recién descubri esto del Efecto Mandela y dure muchos días con el impacto (de hecho aun no salgo de mi asombro ni de mi emoción de este nuevo descubrimiento y de las nuevas oportunidades de crecimiento que esto conlleva)… me recordé de aquel dia de aquel enero del 2013… ¿Seria posible? me llegue a preguntar… ¿entonces si fue real lo de aquel dia?… Para mi esto ha sido tan maravilloso como sorprendente pues siento que espiritualmente hemos crecido y adquirido de alguna forma la capacidad de los desdoblamientos espirituales hacia nuevas realidades y hacia mundos alternos pero en lo que yo creo es tan solo el comienzo de un crecimiento que a quienes lo sigan o lo sigamos nos llevara a crecimientos y habilidades muchísimo mas grandes… En el Universo la casualidad no existe y sabemos que en la vida las oportunidades no siempre son para todos.. y pienso de que por algo fuimos escogidos o elegidos, (quizás no por alguien sino por nosotros mismos) y creo que siemplemente nos decidimos (como seres espirituales de luz que somos) a trascender y a cruzar por este nuevo umbral en el que el Despertar y la autentica Libertad apenas comienzan…. Y creo que los que estamos viviendo esta experiencia somos muy, pero muy, muy, muy superafortunados y debemos de empezar a integrarnos y a ayudarnos y compartir entre todos este nuevo crecimiento….
¡Hola Rubén! ¡Gracias por compartir tus experiencias!
Me tomé la libertad de poner en una misma publicación los 2 comentarios que pusiste en el sitio, junto con el mail que también me mandaste, para que quede a la vista de todos los visitantes. Lo puedes encontrar AQUÍ, dentro del apartado de Historias personales.
En esa publicación te respondo de manera más amplia a cada cosa, así que aquí sólo te pongo un breve resumen. 😉
Tienes mucha razón: no es lo mismo que la realidad existente haya sido modificada a que existan muchas realidades, y de alguna forma nos hayan movido a todos a una diferente. Mi teoría va un poco más por la segunda, con algunas variantes.
Muy interesante lo que comentas de la sensación que tuviste, como de «no estar», de «no pertenecer»; es algo que otras personas han comentado también. Quizás desde ese momento has vivido la transición a otra (u otras) realidades, sólo que el día a día te absorbió y lo fuiste dejando de lado, hasta que terminó por llamar tu atención nuevamente.
Me gusta mucho la forma en que lo planteas y lo asimilas, como una gran oportunidad, como algo maravilloso que nos ha sucedido, pues sin duda es la mejor forma de vivir este fenómeno. Yo también estoy a favor de enfrentarlo de la mejor manera y ver el lado positivo, y sobre todo, considerar las posibilidades infinitas que esto conlleva. Si lo tomamos de la forma en que tú lo expresas, podemos verlo como una señal de crecimiento espiritual que podría llevar a la humanidad a grandes descubrimientos cósmicos. Pero como dices, quizás únicamente sea para quienes decidamos seguir ese llamado a crecer como seres universales, como seres de luz que aspiramos a ser.
Tienes razón, debemos seguirnos apoyando e impulsando como hermanos en este proceso de ascensión. Justamente es uno de los objetivos de esta página, y siempre es un gusto saber que de alguna forma se logra. 🙂
Saludos y gracias por tus comentarios!