La Teoría de la Religión Cristiana

Si no has leído el post donde expongo ampliamente mi teoría sobre las Dimensiones Paralelas Mezclándose, que es lo que yo creo que puede estar provocando el Efecto Mandela, te invito a que la leas y luego regreses aquí a revisar estas otras teorías que hay por ahí para tratar de explicar este fenómeno.

La Religión Cristiana como explicación: ¿acaso el Efecto Mandela es causado por Dios o por el Diablo?

Otra de las teorías más populares para explicar el E.M. es la que involucra la Religión Cristiana, y en ella podemos encontrar 2 vertientes: quienes creen que los cambios son una obra de Dios, y quienes creen que son obra del Diablo. Por cierto, lo aclaro de una vez: siempre me cuesta trabajo separar Catolicismo y Cristianismo; sé que tienen sus diferencias, aunque en el fondo ambos creen en la figura de Cristo y por eso, para mantener esto más simple, lo manejaré de forma indistinta… espero nadie se enoje ni se ofenda.

De los primeros, quienes piensan que Dios está detrás de todo esto, creen que nos está enviando señales para que veamos algún peligro que se acerca y podamos estar alertas, como si quisiera avisarnos de que algo sucederá en nuestra realidad, y ver estos cambios nos pueden preparar ante ese evento. De lo que he visto e investigado, me parece que son mucho menos los que consideran esta posibilidad.

Más bien, la mayoría de la gente que adopta esta explicación cree que es obra del Demonio. Dicen que Satanás trata de tomar el control del Mundo; busca engañar y confundir a la gente para causar división entre las personas (quienes ven el Efecto Mandela y quienes no), generando caos y miedo para alejarlas de Dios y finalmente reinar sobre la Tierra. Los seguidores de esta teoría han interpretado muchos cambios como signos y señales demoníacas y creen que es el inicio del Apocalipsis, o más concretamente, que estamos entrando en el tiempo conocido como La Gran Tribulación.

Una base para sustentar esta teoría es que se han encontrado muchos y muy notorios cambios en la Biblia, específicamente en la versión más popular utilizada por la Religión Cristiana, la conocida como King James Version Bible (KJV, o KJB, o en español sería la Biblia del Rey Jacobo). Esta Biblia, la más usada en los países de habla inglesa es una traducción al inglés que fue publicada por primera vez en 1611 y que hasta antes del Efecto Mandela se había mantenido intacta, conservando incluso el tipo de inglés utilizado -no moderno, poco común actualmente y quizás hasta de difícil lectura para quien no tenga el inglés como su lengua nativa-.

Los cambios que se han encontrado en la Biblia van desde pasajes con diferente título, palabras cambiadas que modifican el sentido de las frases, conceptos distintos, palabras nuevas que incluso ni siquiera existían en el idioma para cuando se publicó por primera vez y hasta el Padre Nuestro está diferente en algunas palabras. Lo destacado aquí es que muchos de los que señalan esos cambios son lectores asiduos de su Biblia, como por ejemplo, pastores o reverendos, quienes están acostumbrados no sólo a leerla sino a memorizar fragmentos para exponerlos a sus fieles; para ellos, su “despertador” al Efecto Mandela ha sido que su Biblia, la que han usado y estudiado por años, en ocasiones esa que ha pasado de generación en generación y tiene más de 100 años en la familia, de pronto dice algo distinto a lo que estudiaron y memorizaron.

Es importante recalcar que dichos cambios han sido señalados en esa versión específica de la Biblia, la KJV (KJB), y que hasta ahora no he visto a nadie que hable de cambios en la Biblia en español; yo al menos no he tenido oportunidad de comparar a fondo esa versión con las de la Biblia local, sólo he podido hacerlo en relación con dos o tres cosas. Y también es importante recalcar que con la Biblia sucede lo mismo que con cualquier otro elemento: no es que se haya reeditado, no es que sean nuevas versiones, no es que las reimpresiones tengan palabras nuevas, no, nada de eso; la Biblia «siempre» ha existido como es ahora, desde 1611 ha sido como se lee actualmente; es como si sus páginas cambiaran de la noche a la mañana, y los fieles lo sienten como un ataque por parte del Demonio para debilitar la palabra de Dios.

No reproduciré aquí los muchos cambios señalados -ya haré más adelante un apartado exclusivo para eso-, sólo comentaré que de los ejemplos que he visto también existen bastantes evidencias residuales que los respaldan. Uno de los más impactantes para los fieles de la Religión Cristiana lo encontramos en Isaías Capítulo 11 versículo 6: «…and the Lion shall lay down with the Lamb…» (…y el león yacerá junto al cordero..), que es como muchos o recuerdan, pero ahora la KJB dice: «…and the Wolf shall lay down with the Lamb…» (…y el lobo yacerá junto al cordero..), lo que cambia por completo el sentido de la metáfora.

Yo soy una persona más espiritual que religiosa, y aunque fui educado en una familia católica, no profeso a fondo la religión; por lo mismo, no soy lector asiduo de la Biblia como para aprenderla de memoria. No obstante, sí conozco muchos pasajes e historias que en ella aparecen por varias razones, y he notado una o dos cosas que recuerdo distintas; y una persona cercana que sí es más lectora de la Biblia me comentó que ya desde algún tiempo había notado un cambio en algún pasaje -ya tendré oportunidad de comentar sobre eso-.

Cuando era niño fui a una escuela primaria de religiosas y constantemente nos enseñaban y nos hacían leer cosas de la Biblia; más adelante en mi vida escolar leí el Génesis y otros libros como tarea; estuve en un grupo juvenil de actividades varias (deportes, campismo, primeros auxilios, etc.) conocido como MJC (Movimiento de Juventudes Cristianas; no son los Boy Scouts, aunque podrían servir más o menos como ejemplo, y no son tan marcadamente religiosos como el nombre sugiere) cuyas juntas (cada sábado) terminaban en una misa opcional, a la que sí solía ir, y estuve en el grupo como 4 años; soy asiduo consumidor de películas, documentales y programas relacionados con historias bíblicas y me gustan mucho las investigaciones que suelen pasar en la TV cada Semana Santa sobre la vida de Jesús y otros pasajes de la Biblia; en fin, no soy experto pero más o menos sí conozco del tema.

Aún así, no podría realmente saber si la Biblia ha cambiado o no -además he leído las versiones locales, nunca la King James Version-; sin embargo, sí estoy seguro de un par de cosas: en la Biblia nunca se hablaba de una criatura fantástica que hoy día se puede encontrar en varios pasajes –incluso en la versión en Español-, el Unicornio. Sí, tal cual, los Unicornios son mencionados en la Biblia. La explicación actual, es que fue una mala traducción y que en realidad se refiere a otros animales, no a los míticos unicornios imaginados como caballos con un cuerno en la frente; pero aún así, en toda mi formación católica jamás había escuchado sobre eso, ni como anécdota, ni como chiste, ni como una curiosidad literaria o histórica, ni como referencia bíblica, ni como crítica a una mala traducción… no, nunca, nada de nada.

Del mismo modo, sé que en la Biblia nunca se habló de campos de maíz, cosa que hoy día sí pasa, lo cual es completamente absurdo porque en aquella época y en esa zona del Mundo no existía el maíz, el cual es un producto completamente Americano que fue llevado al Viejo Continente mucho después, luego de las colonizaciones y la época de las conquistas. En la Biblia se hablaba de cultivos de trigo, sorgo, uvas, no sé, otras cosas, pero no de maíz, eso seguro. Por todo eso y mucho más estoy de acuerdo en que los creyentes tienen buenas razones como para justificar esta teoría y sentirse directamente atacados en su fe.

A pesar de eso, no me parece que esta teoría sea la explicación al Efecto Mandela. Como lo comenté, pese a mi formación, desde hace muchos años no soy una persona muy religiosa, y ese es mi principal cuestionamiento a la teoría: ¿qué pasa con quienes no profesan la Religión Cristiana pero también viven el E.M.? Si alguien no profesa una religión y no cree en sus principios y doctrinas, no se sentirá bendecido por el dios, o los dioses, de la misma; así como tampoco se podrá sentir amenazado por sus demonios. Yo creo en la energía buena y mala, y en que forman un equilibrio, pero no creo en los conceptos tradicionales de Dios y del Demonio como figuras que engloban la bondad y la maldad; y según he visto, muchos de quienes viven el E.M. sienten lo mismo: espiritualidad, mas no religiosidad. Entonces, quien no cree en ninguna de esas figuras, estoy seguro de que no puede ser afectado para bien o para mal por ninguna de ellas.

Alguien podría decir que, por mi formación, sí estuve en contacto con estas figuras y sí me podrían afectar; así que pensemos en alguien que ni siquiera tenga idea de cómo es el Demonio en la Religión Cristiana; ¿también le afectaría lo que Satanás hiciera? ¿Si el Diablo cambiara la realidad le afectaría a esta persona? No creo, esta persona estaría preocupada por los demonios de su propia religión, y en todo caso pensaría que el E.M. es obra de ellos. Y sí, estoy 100% seguro de que hay gente de otras religiones que también vive el fenómeno (al menos he sabido de algunas personas de la India, a quienes el Dios y el Diablo católicos le tienen sin cuidado). Y eso sin mencionar la gran cantidad de gente afectada y que no tiene ningún apego religioso.

Con esto quiero decir también que no me parece adecuada la idea de que haya un Dios y una religión que sea “la buena, la adecuada”: yo creo que todas son igualmente importantes porque todas conducen al crecimiento espiritual, a elevar la frecuencia de vibración y a la evolución como seres cósmicos. Por eso, con todo respeto para los creyentes, me parece que reducir el Efecto Mandela a una obra del Demonio Católico es un poco simplista: esto es un fenómeno mundial que no distingue razas, países, edades ni religiones.

Sí, parece que la Biblia estuviera siendo atacada, pues al ser considerada como «la palabra de Dios», es sagrada, y si algo o alguien la cambia, es como un sacrilegio, y en los conceptos de la propia religión sólo el opuesto a Dios, el Diablo, puede ser capaz de algo así. En mi opinión son cambios simplemente aleatorios, sin un culpable y sin ningún propósito en particular . La Biblia es uno de los libros más leídos, que la gente suele tener muy cerca, tanto a nivel físico como espiritual; por eso genera a su alrededor una alta frecuencia de vibración. Por otro lado, es una creación humana, fue escrita e impresa por seres humanos (como instrumento de Dios, si se sigue la tradición, pero humanos a fin de cuentas). Entonces, si como dice mi teoría, diferentes Dimensiones se están fusionando, en cada una de esas Dimensiones la Biblia -como todo en el Multiverso- debe tener ligeras diferencias, y van sobresaliendo las de mayor frecuencia de vibración, generando los cambios.

De momento no se sabe de cambios en otros textos sagrados, pero muy posiblemente debe ser porque nadie los ha documentado; o tal vez sí se han documentado, pero no se ha difundido tanto; o quizás aunque la gente haya notado los cambios, nadie se ha atrevido a mencionarlos. Habrá que estar al pendiente en este aspecto. Pero con la Biblia, como decía, al ser quizás el libro más leído del mundo, es lógico que la gente iba a empezar a notar las diferencias. Tal vez si más personas leyeran con el mismo interés, atención y memoria otros libros, se hablaría mucho más de cambios en muchas otras obras de la literatura universal.

Ahora, suponiendo que se encontraran cambios en otros textos también, ¿esto implicaría que los diferentes demonios de todas las religiones están cambiando las sagradas escrituras para ponernos en contra de los dioses y de alguna manera controlarnos? Yo no lo creo, sobre todo porque muchos de los cambios no tienen nada que ver con cuestiones religiosas, sino con cosas mucho más terrenales, como marcas y productos, o nombres de personas, en fin, cosas en las que en mi opinión no preocuparían en lo más mínimo a ningún dios o demonio. Más bien, los cambios en las escrituras serían uno más de todo lo que está cambiando.

Y de nuevo regreso a la evidencia residual: si el Demonio es tan poderoso como para alterar el curso de la historia y del Universo mismo, ¿cómo pudo dejar rastros? ¿Acaso no se dio cuenta de que se habían quedado por ahí unas pistas, o se le olvidaron? ¿O el Diablo cambió las cosas pero Dios evitó que se cambiaran por completo y nos dejó esa evidencia para que nos diéramos cuenta y estuviéramos alerta? Y si así fuera, ¿por qué mejor no evitó los cambios desde un principio, por qué dejó que el Demonio hiciera de las suyas? En fin, respeto de verdad las creencias de todo mundo, y si a la gente le funciona la Teoría de la Religión Cristiana, está muy bien; para mí la verdad no abarca por completo el fenómeno y no termina de explicar todo el E.M.

¿Tú eres religioso o espiritual? ¿Qué religión profesas? ¿Crees que el Efecto Mandela sea una obra de Dios o del Demonio, y que la Religión Cristiana es la mejor explicación del tema?